El plegable más raro de Samsung podría cambiarlo todo

Samsung lanzó un móvil que se abre dos veces y muestra una pantalla gigante. Pensado para trabajo, IA avanzada y usuarios expertos.

Galaxy Z TriFold

La forma móvil del futuro desplegable


Un nuevo teléfono plegable se abre dos veces para mostrar una pantalla de 10 pulgadas, pensado para productividad extrema, creatividad y funciones de inteligencia artificial en movilidad.


El nuevo Samsung Galaxy Z TriFold llega como un teléfono que busca rehacer la idea de lo que conocemos como móvil. Samsung presentó este dispositivo como el primer teléfono que se abre dos veces y deja ver una pantalla interna de 10 pulgadas, más grande que la de muchos tablets. Es una apuesta fuerte de ingeniería y diseño que combina tres paneles, dos bisagras nuevas, protección avanzada y una integración profunda con herramientas de inteligencia artificial creadas para funcionar en una pantalla amplia. El TriFold invita a pensar en la evolución de los formatos móviles y en quién podría adoptar un equipo de este tamaño y costo. Su precio cercano a dos mil quinientos dólares deja claro que no es un modelo masivo, pero sí un símbolo del camino que Samsung quiere seguir. ¿Qué significa este nuevo formato para el futuro de nuestros teléfonos?


El Samsung Galaxy Z TriFold se presenta como el resultado de más de diez años de trabajo en pantallas plegables. Samsung había dominado el formato de un solo pliegue con la familia Fold, pero ahora muestra un diseño que va más allá: dos bisagras, tres paneles y una pantalla interna de 10 pulgadas que se despliega como si fuera un pequeño libro técnico. Esta pantalla grande permite abrir varias aplicaciones al tiempo, leer documentos largos con más comodidad y tener barras de herramientas amplias sin que nada quede apretado. Los materiales incluyen titanio, aluminio reforzado y una cubierta pensada para resistir mejor los impactos. El TriFold integra la batería más grande que Samsung ha puesto en un plegable: 5.600 mAh repartidos en tres módulos internos. También trae cámara de 200 megapíxeles, procesador Snapdragon 8 Elite, 16 GB de RAM y opciones de 512 GB y 1 TB de almacenamiento. La promesa es sencilla: ofrecer el desempeño de un móvil premium y al mismo tiempo el espacio visual de un tablet. ¿Es suficiente para que el formato tri-plegable empiece su camino?


El Galaxy Z TriFold abre muchas preguntas. Un móvil que cuesta alrededor de dos mil quinientos dólares no será para todo el mundo, y eso genera dudas entre usuarios y expertos. En redes sociales hay entusiasmo, pero también comentarios que dicen que el tamaño puede sentirse grande para un bolsillo normal. La durabilidad también produce inquietudes. Las bisagras han sido reforzadas y probadas miles de veces, pero los móviles plegables siempre despiertan temor entre quienes tuvieron experiencias con pantallas marcadas o mecanismos sensibles. Otro punto que se discute es la ausencia de soporte para lápiz digital. En una pantalla de 10 pulgadas, varias personas esperaban poder escribir o dibujar como en un tablet. El TriFold tampoco tiene certificación completa contra polvo, algo que llama la atención porque un diseño con dos pliegues tiene más puntos por donde pueden entrar partículas. También está la pregunta del mercado: ¿cuántas personas realmente necesitan un móvil que sea mitad teléfono y mitad tablet? ¿Será este un salto útil o terminará como un experimento?


Samsung diseñó el TriFold para mostrar hacia dónde quiere llevar la categoría. Cada bisagra tiene estructuras internas diferentes, lo que permite que los paneles se encuentren sin dejar espacios visibles. El objetivo es que la pantalla interna quede protegida al cerrar el móvil. La marca incorporó una capa adicional para amortiguar impactos, pruebas con escaneo láser para asegurar la alineación de los componentes y materiales más rígidos en el chasis. Sobre la durabilidad, Samsung afirma que el dispositivo fue probado para soportar unos 200.000 pliegues, lo cual equivale a varios años de uso diario. En cuanto a productividad, la pantalla grande permite tener tres aplicaciones abiertas lado a lado y activar Samsung DeX sin conectar pantallas externas. Esto ofrece un entorno de escritorio completo, casi como si fuera un mini computador. Galaxy AI entra a jugar un papel clave con herramientas de edición, resumen y asistencia visual. Gemini Live, la integración de Google, entiende lo que el usuario ve en pantalla y permite hacer preguntas contextuales sin cambiar de aplicación. Todo esto apunta a un uso muy específico: personas que trabajan en movilidad, crean contenido, revisan documentos complejos o buscan un equipo capaz de reemplazar varios dispositivos en uno.


El TriFold llega en un contexto donde varias marcas exploran el siguiente paso en móviles plegables. Huawei presentó su Mate XT, también de pantalla triple, pero con un diseño que pliega hacia afuera y deja parte del panel expuesto. Ese modelo cuesta más de tres mil cuatrocientos euros, así que Samsung entra a un precio alto, pero algo menor. Apple no ha presentado ningún plegable, pero los rumores indican que trabaja en un modelo flexible para 2026. Expertos en medios coreanos explican que Samsung quiso mostrar el TriFold antes de que Apple moviera la conversación, para mantener la idea de que la innovación en pantallas flexibles sigue liderada desde Seúl. En Estados Unidos varios analistas comparan la propuesta con los primeros Fold: dispositivos que no se vendían mucho, pero abrieron una ruta. En Alemania, algunos medios tecnológicos destacan que el TriFold se ve como un “tablet de bolsillo”. Y en Corea del Sur la conversación se centra en la ingeniería interna de las bisagras, un tema que allá genera mucho interés porque el mecanismo es considerado el corazón de todo plegable. Todos coinciden en que este no será un móvil masivo, pero sí un modelo que influye en cómo se diseñarán los dispositivos de alta gama en los próximos años.


El Galaxy Z TriFold demuestra que aún quedan caminos nuevos en el mundo de los móviles. Su diseño con doble pliegue permite trabajar y ver contenido en un espacio amplio sin llevar varios dispositivos. Es caro, grande y pensado para un grupo reducido, pero marca una dirección clara para el futuro del formato plegable. Si te interesa la evolución tecnológica, vale la pena seguir este modelo. Te invito a escuchar más historias y análisis en Flash Diario en Spotify.